El tránsito fronterizo se incrementó por la llegada masiva de turistas a Posadas. La infraestructura no dio abasto y volver al país se convirtió en una pesadilla que en muchos casos superó las 15 horas. Pedidos de coimas de hasta 20 mil pesos, adelantamientos en la fila y el hartazgo de la espera provocaron escenas de tensión que tuvieron su corolario en un corte total en la tarde del martes.
Argentinos de distintas provincias que intentaban volver de Encarnación a través del puente que conecta a esa ciudad paraguaya con Posadas se enfrentaron a un cuadro de situación desesperante. La cantidad de personas y vehículos que cruzaron desde el sábado hasta el martes superó ampliamente la capacidad de Migraciones y Aduanas y las filas esperando volver del lado paraguayo alcanzaron dimensiones kilométricas.
Los que optaron por cruzar el lunes o el martes debieron esperar hasta 15 horas para volver al país. Muchos de ellos eran turistas que desconocían la dinámica habitual de funcionamiento del puente, que generalmente impone demoras de varias horas, y se encontraron con una sorpresa tan ingrata como inesperada.
Como ocurre cada vez que el puente colapsa, en Encarnación aparecieron personas ofreciendo a los automovilistas la posibilidad de adelantarse en la cola a cambio de coimas que llegaron a los 20 mil pesos.
Entonces los que perdían la paciencia esperando se enojaban con los que se adelantaban, pero más todavía se indignaron muchos de los que abonaron la coima solo para ser rechazados luego en la cabecera del puente, donde las autoridades desconocían cualquier tipo de arreglo y los mandaban de nuevo a hacer la cola, desde el final.
Los que cruzan diariamente, paseros y traficantes de combustible, exigieron a las autoridades mayor celeridad para cruzar el viaducto internacional y también solicitan más controles en los adelantamientos indebidos. Lo llevó a que el martes por la tarde se produjera un corte sobre el puente que duró alrededor de tres horas, tiempo durante el cual el paso estuvo por momentos interrumpido totalmente y por momentos parcialmente.
Los viajeros manifestaron su indignación ante esta situación, afirmando que se sintieron perjudicados y vulnerados en sus derechos. Alegan que los paseros “dueños” de la zona de fronteras les habrían solicitado sumas de dinero en efectivo a cambio de facilitar su paso sin las demoras habituales.
Estos informes de presuntas coimas han generado una gran controversia en la comunidad, ya que la corrupción en los pasos fronterizos es un problema recurrente. Los afectados exigen una investigación exhaustiva para identificar a los responsables y tomar las medidas necesarias para evitar que estas prácticas ilícitas continúen perjudicando a los ciudadanos.
Estos informes de presuntas coimas han generado una gran controversia en la comunidad, ya que la corrupción en los pasos fronterizos es un problema recurrente en la región. Los afectados exigen una investigación exhaustiva para identificar a los responsables y tomar las medidas necesarias para evitar que estas prácticas ilícitas continúen perjudicando a los ciudadanos.
Los afectados han sido alentados a presentar denuncias formales y proporcionar toda la información necesaria que pueda contribuir a la investigación. Asimismo, se ha solicitado la colaboración de la ciudadanía para denunciar cualquier situación sospechosa que puedan presenciar en los pasos fronterizos.
La lucha contra la corrupción en los puntos de acceso al país es fundamental para garantizar la integridad de los controles migratorios y aduaneros, y para preservar la confianza de los ciudadanos en las instituciones. Se espera que las autoridades tomen medidas contundentes para erradicar estas prácticas ilegales y asegurar un paso seguro y ágil por los pasos fronterizos en el futuro.
FUENTE MISIONESONLINE